Para el cuidado de la piel sana, la principal actividad es su limpieza e hidratación. La higiene ha de realizarse diariamente. El modo de realizarla dependerá en muchos casos de las características de cada persona, y sobre todo, de las características e infraestructuras con las que se cuente.
La higiene sirve
Eliminar la suciedad de la piel (sudor, orina, heces, secreciones,…).
Prevenir la aparición de úlceras por presión e infecciones.
Estimular la circulación.
Proporcionar confort y mejorar el estado psicológico.
En la actualidad, las esponjas jabonosas Napa se han convertido en un producto de primera necesidad para la higiene corporal en hospitales, centros asistenciales sanitarios o incluso en el hogar-personas dependientes-, por su seguridad, eficacia y comodidad, tanto para pacientes, como para las personas a su cargo.
¿Cómo asear al enfermo?
Con el enfermo boca arriba ligeramente incorporado, lavar la cara con agua sin jabón y una compresa.
Humedecer ligeramente la esponja jabonosa napa y presionar una o dos veces hasta obtener la espuma deseada. Seguidamente aplicar directamente sobre la piel y efectuar la limpieza corporal.
A continuación, limpiar con una esponja jabonosa napa brazos, manos, axilas, pecho, región submamaria, abdomen, piernas y pies, insistiendo en los espacios interdigitales.
Colocar al enfermo de lado y, con otra esponja jabonosa lavar el cuello, espalda, glúteos y parte posterior de las piernas.
Una vez realizado el lavado, secar, sin necesidad de enjuagar.
http://www.medicalcanada.es/busqueda/NAPA/index.aspx